Para un público dorado
Hace algunos años, hablar de un colectivo o de un público senior, formado por personas exigentes por su experiencia, pero también dispuestas a no privarse de bien merecidas recompensas y comodidades, parecía una utopía. Hoy día es una realidad y la edad de inicio de este grupo se rebaja, en muchos casos, de 65 a 55 años.
La emergencia de esta comunidad, que no se conforma con cualquier cosa y busca una oferta adaptada a sus condiciones y circunstancias, ha obligado a muchas empresas a cambiar su perspectiva.
El sector turístico o las compañías de coches que diseñan sus automóviles teniendo en cuenta que van dirigidos a mayores de 50 son dos apéndices de este cambio de cultura empresarial. Y el nacimiento de líneas específicas de productos bancarios, entidades que suelen ser estupendos husmeadores de lo que se cuece en la realidad, no dejan de confirmar esta impresión.
El último en sumarse a esta tendencia ha sido el BBVA, que con su programa 59 + ofrece a sus clientes más veteranos ventajas y privilegios que premien su fidelidad.
Sin embargo, su iniciativa sigue el ejemplo marcado en su momento por cuentas pioneras en este campo, como la del Clubsenior del Banco Popular o la BS Cuenta Senior del Banco Sabadell. En ambos casos se trata de dar un valor añadido al cliente mayor, con descuentos en servicios, ofertas y ventajas financieras atractivas para el perfil de sus contratantes.
Mediante sus respectivas páginas web, el dueño de una cuenta de este tipo puede informarse de los beneficios que le corresponden, ya sean precios especiales en viajes o alquiler de coches, rebajas en balnearios, restaurantes, ópticas o talleres automovilísticos, grandes condiciones para reformas del hogar y una vasta gama de otros servicios y facilidades.
En añadidura, ambas webs tienen una sección de artículos, que nos ofrecen información sobre asuntos legales y de salud en el caso de Infosenior, o que nos aportan propuestas de ocio, hogar y gastronomía en el de Clubsenior, siempre orientados a satisfacer inquietudes senior.
Otras corporaciones financieras que han empezado a comprender el potencial que tienen sus clientes que ya cincuentean –y lo descuidados que estaban hasta ahora, habida cuenta de que casi cualquier banco o caja cuenta con programas y tarjetas jóvenes- son Caja Laboral-Euskadiko Kutxa, que dispone de cuenta Super55, Caixa Catalunya con su Compte Plus 55, la Kutxa y su servicio dorado o la Banca March, con su March Clàssic, entre otras, que si bien no disponen de webs exclusivas o de una oferta tan amplia y minuciosa como las anteriores, también dan a sus clientes algunas de las ventajas más extendidas para los contratantes de este tipo de productos: anticipos de pensión, descuentos en seguros, servicios de asesoramiento legal, ofertas de vacaciones o regalos por inscribirse.
No obstante, pese a apreciarse un cambio de mentalidad –que comienza por admitir que existe un perfil senior y por rebajar la edad de admisión de los antaño inevitables 65 a los 55- se percibe que apenas estamos al comienzo de un largo camino que llevará a los gestores comerciales a comprender que están ante personas que, con las deudas pagadas y los hijos criados, presentan solvencia económica, tiempo para disfrutar y una buena salud para hacerlo sin cortapisas. Es decir, un tipo de cliente mucho más agradecido y menos problemático que tantos otros a los que hasta hoy se han dispensado muy superiores atenciones.
Sin duda, yo encontré todo tipo de productos para gente mayor en http://www.avisavi.es os lo recomiendo! el servicio fue rápido, me aconsejaron profesionalmente. realmente lo recomiendo. Tienen muchas cosas interesantes. Me encantan este tipo de tiendas para poder ayudar a la gente que mas lo necesitas. Gracias de verdad!